*Hay presión por las cadenas de suministro; automotrices en Europa podrían parar por falta de partes chinas

10/02/2020-Ciudad de México-El Economista/Agencias

En China, varias empresas permanecerán cerradas este lunes, a pesar de los esfuerzos del gobierno para poder reactivar la segunda economía más grande del mundo.

El Consejo de Estado de ese país instó a las industrias más perjudicadas, como la aviación, a reanudar las operaciones lo antes posible. La mayoría de las provincias pidió a las empresas locales que vuelvan a abrir este lunes después de una extensión de emergencia por 10 días, que se empalmó con los festejos del Año Nuevo lunar.

Ciudades importantes como Pekín y Shanghai recomendaron a los ciudadanos trabajar desde sus hogares, mientras que empresas como Alibaba y Meituan, dos de las compañías tecnológicas más grandes de China, extendieron sus vacaciones hasta el 16 de febrero.

Foxconn, el mayor generador de empleos de China y contratista de Apple, no reanudará las actividades de su planta de producción de iPhone en Zhengzhou, provincia de Henan, informó Jin Boyang, miembro del comité local de control de epidemias.

Algunas regiones, incluida la provincia de Heilongjiang, en el noreste del país asiático, indicaron a los empleadores de ciudades afectadas por el coronavirus que extiendan las vacaciones durante otras dos semanas.

El número de muertos aumentó a 815 durante el fin de semana, según datos de las autoridades. Con este número, supera las 774 muertes causadas por Sars, una enfermedad respiratoria similar que paralizó a China hace 17 años. Las infecciones confirmadas por coronavirus ahora son de 37,612 o, dicho de otra manera, casi cinco veces el número de infecciones de Sars.

El problema del coronavirus encendió las alarmas de la economía global, sacudió los mercados financieros y presionó severamente las cadenas de suministro.

La empresa Fiat Chrysler advirtió la semana pasada que podría verse obligada a detener la producción en Europa, después de tener contratiempos para obtener partes de China. Mientras los precios del cobre, el petróleo y el gas se vieron afectados por la amenaza de una desaceleración prolongada.

El brote podría hundir las esperanzas de Pekín de establecer la meta de crecimiento económico de este año en alrededor de 6 por ciento. Se especula cada vez más que el Congreso Nacional del Pueblo, evento donde se anuncia el objetivo de crecimiento cada mes (el siguiente es en marzo), tendrá que bajar el pronóstico.

El fin de semana Standard & Poor’s redujo a 5% su pronóstico de crecimiento para China desde 5.7% anterior.

La epidemia también puede evitar que China aumente las compras de bienes y productos estadounidenses por 200,000 millones de dólares en los próximos dos años, según lo acordado en la fase 1 de la tregua comercial con Estados Unidos.

Fed ve menos riesgos para la economía
Por otro lado, en su informe de política monetaria al Congreso, la Reserva Federal de Estados Unidos destacó que, entre los riesgos para el crecimiento, están las consecuencias del brote de coronavirus en China, los elevados valores de los activos y los niveles casi récord de deuda corporativa de bajo grado que el banco central teme que puedan convertirse en un problema durante una recesión.

Advirtió que “la reciente aparición del coronavirus podría conducir a trastornos en China que se extenderán al resto de la economía global”.

Por otra parte, el Banco de Italia predijo este sábado un crecimiento “limitado” para el país de la bota en el 2020 y dijo que el coronavirus puede penalizar unas décimas su PIB, que, según el dato adelantado, se contrajo 0.3% en el cuarto trimestre del 2019 en comparación con el trimestre anterior.




Fuente: https://www.eleconomista.com.mx/economia/Companias-chinas-postergan-su-apertura-hasta-el-16-de-febrero-20200209-0086.html