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La actividad económica en México presentaría una mejoría en octubre del 2021, con un buen comportamiento en el sector servicios y la industria, ante el avance en las condiciones epidemiológicas y una mayor movilidad.
Para los analistas, los datos apuntan a que la economía retomará la tendencia de recuperación en lo que resta del año.
De acuerdo con los resultados del Indicador Oportuno de la Actividad Económica (IOAE) del INEGI, se estima una variación mensual del Indicador Global de Actividad Económica (IGAE) de 0.59 por ciento en octubre, luego de registrar un crecimiento de 0.29 por ciento durante septiembre.
Esta expansión sería la más elevada desde marzo pasado, cuando subió 2.25 por ciento, en las cifras ajustadas por estacionalidad.
Por sector, se estima un avance mensual de 1.1 por ciento en las actividades secundarias, y se espera que las actividades terciarias aumenten 0.8 por ciento con respecto a septiembre.
A tasa anual, el instituto estima una variación positiva del IGAE de 1.8 por ciento en octubre, su menor alza desde marzo del 2021.
“En caso de que el Indicador Global de la Actividad Económica corrobore la evolución que anticipa el Indicador Oportuno, al final de octubre 2021 habría alcanzado un nivel similar al de septiembre 2016″, apuntó en su cuenta de Twiiter, Julio A. Santaella, presidente del INEGI.
El índice se ubicó en 108.65 puntos en el décimo mes, con lo que se ubicó 2.6 por ciento de su nivel previo a la pandemia, de febrero de 2020. En la actividad industrial el índice se encuentra 3.5 por ciento por debajo, y en el caso de los servicios es una cifra similar, con 3.6 por ciento.
Señales positivas
Jacobo Rodríguez, director de análisis de BW Capital, señaló que con los datos mencionados, la economía mexicana se podría acercar al crecimiento proyectado por la firma, de 6.2 por ciento para todo el año.
“El dato sobre la estimación de la actividad para octubre es un indicativo de recuperación económica respecto a los meses anteriores; sobre todo en la parte industrial, que se ha visto afectada por los problemas de abasto y de suministros”, indicó el especialista.
Añadió que esto genera optimismo para el último trimestre del año, en el que se esperaría mayor dinamismo de la economía, derivado de un mayor consumo.
Para analistas de Banorte, con los datos divulgados, las señales para el final del año parecerían ser más fuertes, con indicios de una aceleración en la recuperación, a su vez consistente con su expectativa de un avance de 5.7 por ciento en todo 2021.
“Si bien un efecto de base explica parte de la recuperación, creemos que hay varios factores de impulso, con mejores condiciones epidemiológicas y mayor movilidad”, apuntaron, y añadieron que tras estas cifras consideran que la actividad retomará la tendencia de recuperación en lo que queda del año.
Explicaron que el avance de la industria es consistente con las señales de un mayor dinamismo global y local, mientras que los servicios fueron impulsados por una mejoría en torno a la pandemia, que aceleró el consumo.
“De manera general, la economía aprovechó las condiciones de mayor normalidad que prevalecieron tras un tercer trimestre caracterizado por la tercera ola de Covid y las disrupciones en las cadenas globales de valor, aunque el proceso de recuperación todavía está en marcha”, señaló Marcos Arias Novelo, analista económico de Monex.
Agregó que las condiciones actuales sugieren un panorama de crecimiento continuo durante los próximos meses, por lo que la economía mexicana seguirá su camino hacia el cierre de las brechas generadas por la crisis.
“Hacia delante, el impulso de la demanda estadounidense seguirá beneficiando a la actividad en nuestro país, pero será necesario encontrar nuevos catalizadores que propicien el dinamismo interno”, añadió
Por su parte, Alain Jaimes, analista económico de Signum Research, dijo que la variación positiva respondería al efecto estadístico del levantamiento en las medidas de confinamiento, producto de las campañas de vacunación, pero aún no se disiparía la incertidumbre de cara al último trimestre.
“Aún continúa vigente cierto grado de incertidumbre en el nivel de producción de varias industrias manufactureras por la escasez de semiconductores y disrupciones en las cadenas de suministro a nivel mundial, lo que genera presiones adicionales en el ritmo de recuperación económica, el cual ya se estimaba modesto en México debido a la tímida respuesta fiscal”, comentó.