Un precedente en el liderazgo femenino
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*TenarisTamsa en su centro productivo de Monterrey puso en marcha un proyecto para incorporar más mujeres en sus áreas operativas, 5 de ellas nos comparten sus historias
09/03/2022-Veracruz, Ver. -Boletín
A mediados de 2021 en la planta de conexiones en Monterrey inició una campaña para reclutar mujeres que pudieran integrarse al equipo de sus áreas operativas. Zuliy Fernández, Karla Mariano, Antonia Martínez, Verónica Díaz y Deyanira Pérez forman parte del primer grupo de operadoras que han demostrado que el género no es un impedimento para tener un buen desempeño en sus actividades.
Cuando Zuliy se enteró por medio de una amiga estaban contratando mujeres decidió postularse, a pesar de que le habían comentado que el trabajo era “pesado”. Hoy como ayudante general en el área de recuperaciones asegura que “aunque al principio ha sido cansado, día a día me siento satisfecha de estar logrando cosas que no todas las mujeres nos atrevemos a hacer”.
Para ella ha sido un reto “trabajar esmerilando piezas porque nunca lo había hecho, sentía que sería difícil, pero siempre he sido muy competitiva y vi esto como una buena oportunidad para demostrar que las mujeres tenemos las mismas capacidades y habilidades”.
En el camino comenta que ha contado con el apoyo de sus compañeros, quienes le han enseñado a desempeñar sus actividades con Seguridad. “Mi mayor reto ha sido poder hacer las mismas actividades que un hombre, sentí muchas miradas sobre mí que pensaban que no podría, y tengo la satisfacción de demostrar que lo estoy logrando”.
Karla siempre había trabajado en empresas del ramo alimenticio, hasta que vio un anuncio en Facebook de TenarisTamsa y le llamó la atención incursionar en el sector metalúrgico. Así fue como ingresó al área de terminación y posteriormente a recuperaciones.
“Cuando entré nada más éramos una compañera y yo, pero el recibimiento por parte de los chicos fue muy agradable. Siempre hemos tenido su apoyo y cuando tenía una duda ellos estaban dispuestos a responder”, comparte.
En este desafío, Karla asegura que le ha servido mucho “ser una persona que aprende rápido… Me da gusto que Tenaris esté dando la oportunidad a más mujeres, porque, aunque parezca que sólo los hombres pueden hacer el trabajo más pesado, las mujeres también tenemos muchas habilidades”.
Cada vez que Clara pasaba por las instalaciones de TenarisTamsa se fijaba si estaban contratando mujeres hasta que un día vio una publicación en redes y no dudó en postularse. Ahora como ayudante general se encarga de lubricar las piezas que se fabrican en la compañía.
“Cuando entré me sentía rara porque eran puros hombres y es algo incómodo, pero después te vas adaptando a todo. A veces decía que no iba a poder con el trabajo, porque se me cansaba el brazo, me repetía que sí podía y aunque batallé un poquito le agarré la onda”, cuenta.
A 6 meses de haber ingresado, Clara asegura que el trabajo “ha cambiado muchas cosas de mí, para bien, y me da gusto porque sirve de inspiración para mujeres como mi hermana que ya se están interesando en este ambiente laboral”.
El día que Verónica le pidió a su esposo, quien había ido a una entrevista de trabajo a Tenaris que preguntara si no estaban contratando mujeres, jamás imaginó que hoy estaría trabajando en el área de materia prima de la compañía.
“Cuando me mandaron al área todos me recibieron muy bien, con mucha igualdad, nunca me hicieron a un lado, al contrario, los primeros días dudaba que iba a poder y el compañero encargado de entrenarme me decía: “no te rindas, no te voy a dejar hasta que aprendas”, así que me propuse intentarlo hasta que agarré la onda”, comparte.
Una de las mayores satisfacciones para Verónica es servir de inspiración a jóvenes como una de sus dos hijas, quien a sus 17 años ya sueña con seguir el ejemplo de su mamá. “Me he cruzado con otras chicas que vienen a los cursos y les digo que le echen ganas, que no se rindan, que el ambiente laboral es muy bueno y que nosotras también podemos hacer el trabajo que hacen los hombres”.
Mientras buscaba una oportunidad laboral, Yidah se enteró de las vacantes disponibles. “La verdad me sentí muy bien de que se estuvieran abriendo oportunidades para nosotras y me pareció muy retador”.
Después de los cursos de capacitación fue asignada al área de galera, donde “vi que el trabajo era un poco rudo, pero no dudé que podía hacerlo, me asustaba el hecho de no poder cargar las turbinas o las herramientas que utilizamos, pero cada día se me hace más fácil”.
Un reto para Yidah ha sido combinar su trabajo con su labor como mamá. “Mi hija tiene 9 años, le he contado lo que hago, ha visto el equipo de protección que traigo y se sorprende. Creo que esta es una manera de enseñarle a que sea perseverante, porque con la práctica te vas acostumbrando y cada día va siendo más sencillo”.
Estas valientes mujeres han podido romper los prejuicios, sesgos y paradigmas sobre el trabajo “para hombres”, demuestran como las mujeres están listas física y mentalmente para realizar las mismas labores que durante años se han desempeñado por el sexo masculino.
Reconocemos el esfuerzo de Zuliy, Karla, Clara, Verónica y Yidah e invitamos a compartir más historias inspiradoras como las de ellas que lleven ejemplo a nuevas generaciones de niñas y jóvenes adolescentes.