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Medio Ambiente |
Jóvenes egresados del Posgrado en Derecho Energético de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) está pujando para llevar a Silicon Valley, Estados Unidos, un proyecto de escalamiento de negocio referente a la producción de combustibles ambientalmente amigables a partir de desechos plásticos.
El grupo conformado por tres mujeres y tres hombres, liderado y patrocinado por el Grupo Promotor de la Cámara Nacional de la Industria Energética (PROCNIE), Asociación Civil, primero tendrá que ser seleccionado entre los diez finalistas de México, de los cuales, en una eliminatoria que se llevará a cabo el 8 de septiembre en la Universidad Juárez Autónoma de Tabasco (UJAT), saldrá el ganador que representará al país en el gran certamen internacional Startup World Cup 2022.
De acuerdo con la convocatoria, el concurso internacional se llevará a cabo en la capital mundial de la tecnología el 30 de septiembre, premiando con 1 millón de dólares al proyecto ganador.
En México participaron alrededor de 80 proyectos innovadores de emprendedores de todas partes del país, coordinado por Secretaría para el Desarrollo Económico y Competitividad de Tabasco, en conjunto con la Oficina de Convenciones y Visitantes (OCV) y la Red Emprende Tabasco, además de la UJAT.
Sergio Ampudia Mello, presidente de PROCNIE, comentó que el impulso a los jóvenes egresados del posgrado forma parte del objeto social de la Asociación Civil. “Para nosotros es un tema de fortalecimiento de una industria energética mexicana que tiene muchos visos de ser rentable”, aseguró para Energía a Debate.
“Decidimos hacerlo con estudiantes del Posgrado en Derecho Energético de la UNAM porque ahí hay un gran capital humano, un gran capital intelectual con una gran capacidad de discernir y escribir propuestas como esta”, agregó y refirió que los miembros del grupo tienen como carreras de origen la de Derecho, Ingeniería Química y Contaduría.
El proyecto
El proyecto consiste en un modelo de escalamiento del negocio de la producción de combustibles limpios y con mayor eficiencia energética a partir de desechos plásticos y mediante un proceso de pirolisis.
“Son hidrocarburos provenientes del plástico ya refinado, estabilizado de manera sólida, pero sus cadenas de carbono son más largas que las de los combustibles que se utilizan para movilidad”, explicó Ampudia Mello, quien también es catedrático fundador del posgrado.
Añadió que los plásticos de desecho pueden ser transformados gracias a que el azufre y los metales pesados ya les fueron retirados cuando fueron elaborados, por lo que al quemarse en presencia de oxígeno ya no emiten gases dañinos. Por eso enfatizó que para la elaboración de los combustibles a partir de estos desechos no se hace por refinación, sino por la pirolisis.
Subrayó que este proceso hace un gran beneficio al medio ambiente porque retira los plásticos y tiene además un costo social relevante que, de acuerdo con el académico, debería cuantificarse.
“Lo que nosotros estamos proponiendo para la Startup World Cup es encontrar el modelo de negocios que genera a gran escala, que permita que se instalen [las plantas productoras] en aquellos lugares donde hay disponibilidad de plásticos y hay demanda de combustibles limpios”, apuntó.
Al respecto, dijo que eso es relativamente sencillo de ubicar, una vez que se identifica quién va a comprar el combustible limpio. “Es un tema simplemente de mercado”.
Comentó que en México ya existen algunas plantas productoras de estos combustibles en lugares como Cancún, Quintana Roo; Guadalajara, Jalisco, y Aguascalientes.
El tiempo correcto
Sergio Ampudia consideró que este proyecto, en el cual han venido trabajando desde hace unos dos años, se presenta en un buen tiempo.
“Hoy se combina el hambre con las ganas de comer”, expresó. “Se combina la existencia de una tecnología comercialmente escalable, se combina la necesidad de reducir emisiones producidas por la quema de combustibles fósiles y se combina la existencia de gran contaminación de plásticos en todo el mundo”, abundó.
También recordó que actualmente se está dando el incremento constante de los precios internacionales del petróleo y en general de los energéticos, a la par que se busca que las economías abandonen el uso de los combustibles fósiles en la medida que se pueda.
En el ámbito nacional, Ampudia dijo que, a pesar de que la política energética de la actual administración está enfocada hacia los combustibles fósiles, en realidad ni la plataforma de producción petrolera, ni las refinerías han logrado aumentar sus niveles, por lo que ahora es cuando más se necesitan de soluciones alternativas, “así que ya se vuelve muy atractivo pensar en otro tipo de formas energéticas alternativas que no estaban en el radar cuando inició esto”.
Por ello resaltó los beneficios de esta tecnología, de la cual aclaró que no es nueva, pero sí tiene gran oportunidad de escalar en México.
“Es un proyecto con grandes atributos ambientales porque sirve para descarbonizar el suelo, primero, y la atmósfera después cuando ese combustible se utiliza en complemento de los petrolíferos, como la gasolina y el diesel”, insistió.