El asesor de Infraestructura del Consejo Coordinador Empresarial (CCE), Marco Gutiérrez, planteó que no se cuenta con una estrategia nacional para fomentar las ciudades inteligentes, aunado a la falta de voluntad política para promover las inversiones relacionadas con el uso de la tecnología en los municipios.
“No hemos visto una voluntad política para promover la inversión ordenada en tecnología para los municipios, en México 80% de los recursos de los municipios dependen de participaciones federales”, abundó.
Para plantear una estrategia nacional, agregó, hay que pensar en una política pública que impulse las ciudades inteligentes, desde el diseño del presupuesto; por tanto, planteó que las partidas financieras se alineen con los estándares de desempeño de los municipios, así como implementar tecnología para la gestión de recursos municipales.
“No se utiliza un indicador para que los municipios transiten a una ciudad inteligente. Hay 18 grupos de indicadores para transitar a una Smart City, desde indicadores financieros, gobernanza, servicios públicos, salud, seguridad, recreación, deporte, transporte, conectividad, servicios básicos, agua, energía, basura”, refirió.
En este sentido, el asesor del CCE destacó que para plantear una estrategia nacional se debe contar con la participación de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), aunado a que se den incentivos a los municipios que cubran ciertos indicadores para transitar hacia una ciudad inteligente.
A los retos que vive el país para impulsar estos sistemas de ciudades, se suma la brecha de talento especializado en la industria de tecnologías de la información, cifra que se duplicó tras los efectos de la pandemia, añadió el gerente general de Monterrey Digital Hub, Eduardo de la Garza.
Si bien hay emprendimientos en la materia, resaltó la necesidad de aumentar la inversión en capital de riesgo en el segmento de tecnología. “Tenemos una brecha de talento digital que en prepandemia (eran) 500,000 posiciones de talento que no se reclutaron y se ha duplicado en postpandemia”.
Ante este contexto, resaltó el alza de 7.4% en digitalización que reportan las firmas mexicanas, aunado a la inversión en datos que se prevé llegue a 4,500 millones de dólares en el 2022, estimando que en el 2024 esa cifra crezca 8.4 por ciento.